La reacción de cada paciente irá determinando el tipo de alimentación que llevará, Hay pacientes a quienes la quimioterapia no les provoca ni nausea, ni vómito, ni diarrea y otros presentan todas. Otros sufren anorexia: con tan solo pensar en comida u olerla les da asco y pierden el apetito. En todos los casos es muy importante mantener su sistema inmune fortalecido por que la quimioterapia lo ataca al reducir o eliminar las células cancerígenas que se reproducen rápidamente.
También es muy común la distorsión del sentido del gusto, esa sensación afecta mucho la alimentación del paciente, a veces se presenta sólo por unos días y otras por semanas enteras, es por ello por lo que a veces hay cambio de peso. Los síntomas van a determinar el tipo de dieta, si tiene náusea preferirá alimentos salados y fríos, si por el contrario tiene diarrea, le caerá mejor el pan tostado, agua de arroz y la avena. Si hay estreñimiento aumentar el consumo de líquidos, papaya, ciruela. En este caso es muy importante reportar al médico si el paciente no defeca por más de tres días ya que requerirá de un apoyo farmacológico.
Otra reacción común es la intolerancia a los aromas, en este caso se recomienda evitar la presencia del paciente mientras se preparan los alimentos y si esto resulta imposible, entonces ventilar el área mientras se cocina, para impedir que perciba los aromas y por consecuencia vomite.
Cuando un paciente tiene mucha nausea y vómito la prioridad es que se mantenga hidratado. También es primordial que la familia respete las sensaciones del paciente: “A veces en su afán por mantenerlo fuerte lo presionan de más y lo obligan a comer, en ocasiones comer una cucharada más los hace vomitar y pasarse muy mal el resto del día. Hay que aprender a dejar pasar los días malos y aprovechar los días buenos, entender que el paciente no deja de comer por gusto sino por la forma en la que reacciona su organismo.”
En general los pacientes con quimioterapia tienen la libertad de consumir todos los alimentos que toleren, salvo aquellos que son muy ácidos como la toronja debido a que tiene una hormona que inhibe la eliminación de la toxicidad de la quimioterapia.
Evita la automedicación
Norma Ortiz aconseja evitar la automedicación: “Es muy común que los pacientes en las salas de radioterapia y quimioterapia se recomienden desde té de guanábana hasta cúrcuma pasando por jugos e incluso pastillas que comienzan a tomar sin reportarlo a los médicos. Es muy importante no tomar cosas solo porque otra persona se los sugiere, aunque sea aparentemente solo para subir las defensas. A veces se angustian mucho porque los doctores les dicen que si bajan las defensas no pueden aplicarles la quimioterapia y esto es cierto, podría ser mayor el daño que el beneficio que podrían recibir en ese caso. Sin embargo, es importante evitar consumir cosas de dudosa procedencia o poco estudiadas sin el aval del especialista que los está tratando.”